Es indiscutible el hecho que la pandemia ha afectado a todos en distinta escala, pero centrándonos en las marcas, tanto grandes empresas como emprendedores y micro empresas se han visto afectados, varios teniendo que suspender sus servicios o incluso cerrar; otras en cambio, han tenido que hacer cambios sustanciales para seguir a flote. La pregunta que surge es ¿cómo pueden las marcas promocionar sus productos y servicios sin parecer indiferentes al COVID-19?
No podemos asumir que la pandemia ha pasado, hemos visto que ciertos grupos de personas están más receptivas a que ciertos comercios como restaurantes, tiendas de tecnología o de ropa abran nuevamente sus puertas, no obstante, se espera una cuota alta de responsabilidad y prudencia, además de comunicar con claridad cuáles son las acciones que estarán tomando.
¿Replantear la estrategia en general?
Es evidente que todas las marcas tuvieron que hacer ajustes a su estrategia, ya sea adaptarse a la modalidad online como impulsar aún más sus redes sociales, habilitar pasarelas de pago y otros medios, disponer de tienda o catálogo en línea, hacer uso de videos, webinars, entre otros, así como implementar, recoger de manera express en tienda o envíos a domicilio con un servicio propio o a través de terceros.
Antes de querer promocionarse, las marcas requieren contar previamente con una estrategia que se adapte al contexto que se está viviendo, contar con las tácticas y los recursos necesarios, tanto si están ofreciendo sus productos a domicilio, o si cuentan con tiendas físicas para atender a sus clientes. Lo mismo con sus colaboradores, si cuentan con los insumos que se requieren, ya sea para trabajar desde casa o para estar en una oficina o tienda.
Si no se tiene una estrategia clara, poco importará cuánto se invierta, los resultados no serán los esperados, además de que se correrá el riesgo de afectar la reputación, si se ofrece solamente pero no se garantizan cambios o mejoras en el servicio.
Es importante mantener la visibilidad.
Para promocionarse, es más factible para las marcas optar por contenidos balanceados, apelar al contenido de valor y trivial para mantener el interés de la comunidad hacia la marca y seguir generando interacciones, mantener la visibilidad es fundamental. En cuanto al contenido promocional, este se puede recalcar de forma puntual cuáles son las medidas que la marca está tomando, ya sea para su atención en tiendas, como el delivery o servicios en línea; hay que comunicar en qué canales pueden contactar a la marca y mantener un mismo mensaje en cada uno.
Principalmente en el tema de las ofertas o promociones de 2×1 es de repensar pues un beneficio puede interpretarse como insensibilidad frente a la situación de salud y económica. Asimismo, hay que cuidar la línea de mensaje, pues esta tiene que ser clara, evitando irse a los extremos, es decir, no hacer de cuenta que la pandemia ya pasó o minimizando la realidad, ni caer en un mensaje fatalista o con falso optimismo, con mensajes como “ayúdanos a conservar nuestro empleo” o “es momento de reactivar la economía”, que pueden incomodar a los consumidores.
La estrategia no debe girar únicamente en torno al Coronavirus
Recalcamos la importancia de no tener una comunicación pendular, si bien, sería un error que las marcas asuman en sus mensajes que ya no existe el COVID-19 o que la situación está igual que antes, tampoco es una buena idea girar toda la estrategia en torno al Coronavirus. Al inicio de la pandemia, muchas marcas crearon contenido de valor como infografías o videos hablando sobre los síntomas, las medidas de prevención y la desinfección de objetos, lo cual fue un acierto, pero, hablar del mismo tema en demasía resulta desgastante, en especial cuando el giro de negocio de la marca no está relacionado con temas médicos o de salud, o cuando la marca solo replica el contenido de fuentes oficiales o de terceros. Como parte del contenido de valor, es aplicable buscar temas relacionados tanto con la marca, como con otros tópicos, actividades en casa o capacitaciones en línea, nuevamente, sí y solo sí estos se relacionan con la marca y sus productos y servicios.
Otras acciones no recomendadas, son lanzar campañas o promociones haciendo uso innecesario de texto o keywords como “Pandemia”, “Covid” u otros que pueden dar una mala imagen o generar rechazo por las audiencias, por ejemplo: “Descuentos de reactivación”, “precios para morirse”, “con esta promoción ya no querrás volver a salir de casa”.
Hay un dicho que cita a río revuelto, ganancia de pescadores, haciendo referencia a las personas que pueden sacar provecho u obtener beneficios de alguna situación confusa o ajena, este refrán aunque pueda parecer ingenioso, no necesariamente es el mejor camino a tomar; es importante seguir en operaciones pero manteniendo una comunicación acertada y una estrategia orientada a servir a los clientes y compradores con los protocolos que sean necesarios. Si bien es importante buscar oportunidades, es imprescindible tener cuidado de no parecer oportunistas.
Hay otros detalles que se abordaron anteriormente en este artículo COVID-19 ¿Es momento para hacer publicidad en redes sociales?